El poderío inigualable de la chiquillada; aderezó el encuentro estelar de la Liga Independiente de Futbol Rápido de la Colonia XEW en su categoría infantil, donde los Piskis de la genialidad de Gerardo el ‘Bolillito’ Estrada se apoderaron del triunfo al son de 3-1.
Este sábado, el pequeño rectángulo enclavado en las inmediaciones del río Amajac en las cercanías del puente de Zacatipán soportó el paso implacable de toda una pléyade de futbolistas menores ávidos de trascendencia, que se batieron con pelota de por medio, en cuanto el árbitro Carlos Mejía Ángeles, permitió las acciones.
Sin escatimar esfuerzos, los jugadores de ambos equipos, trazaron su propuesta basados en la idea de sus estrategas, y aunque lo intentaron durante la primera mitad, las ofensivas impusieron condiciones impidiendo que se moviera el score, aunque los Piskis fueron más propositivos, solo quedaron en intentonas; sin embargo apenas abrió el segundo rollo, hizo efecto la charla en el vestidor, la ofensiva comenzó a taladrar, sobre todo por el sector izquierdo con un ‘Bolillo’ Estrada punzante, notorio al lanzar un pase preciso, para que el aquismonense Emanuel Echavarría llegará como bólido, metiendo tremendo testarazo que terminó por poner a bailar las redes para el 1-0, score que dio seguridad y confianza a las huestes del dúo maquinador Roque-Vargas.
Empujando desde el fondo, los ‘Piskis’ con Martínez, Cruz, Ramón; además de un generador medio campo con García y Barajas, Ramón, Estrada, Vargas y Echavarría carburaban con versatilidad. La tarde era del ‘Bolillito’ quien aprovechó otra jugada, para golpear la pelota pegada al poste, recetando el 2-0 en un festejo peculiar se cuadro ante sus seguidores y para colmo tras otro ataque, el mismo explosivo jugador axtlense no solo coronó gran mañana futbolera, sino que terminó por el centro entre un mar de piernas con el esférico en las piolas, concretando el 3-0 que dejó a Coaxocotitla como a Rosita Alvírez con 3 tiros en la frente, sellando el gol con un festejo similar; pero ahora se cuadró ante el jefe de jefes, su padre Gerardo el ‘Bolillo’ Estrada. No hubo más, así los decretó el silbante Mejía Ángeles, los Piskis se agenciaban importante victoria.