Matlapa.— La carretera estatal Matlapa-Tampacán continúa deteriorándose, con grandes baches y desprendimientos de asfalto que representan un grave riesgo para los conductores que transitan por ella a diario.
En ocasiones, los residentes de la zona intentan reparar los baches rellenándolos con piedras y grava. Sin embargo, las lluvias recurrentes deterioran rápidamente estas reparaciones, generando nuevos baches.
Un caso particular se presenta en la localidad de Tlamaxac, donde el asfalto ha comenzado a hundirse en uno de los carriles. Esta situación afecta el tránsito vehicular, obligando a los conductores a invadir el carril contrario, lo que podría provocar un accidente grave.