Tamazunchale.- Varias fueron las quejas realizadas por consumidores a través de redes sociales y ante este medio, luego de que expendedores de pollo den un producto de pésima calidad, sin importarles que su venta pueda generar daños a la salud.
Reportó ante éste medio Claudia Solórzano, que la tarde del domingo acudió a comprar una pechuga de pollo, pero esta se tornó con puntos negros y color verdoso, misma que al empezar a hervir, desató un olor desagradable, por lo que supuso que por las altas temperaturas éste comenzó a descomponerse más rápido, la sorpresa fue que no fue la única, sino más familias que rápidamente hicieron su queja, por lo que se destacó que sin control, algunos comerciantes bajan sus precios con tal de vender la carne a punto de descomponerse.
Los presuntos vendedores de carne putrefacta, en grupos de ventas de Whatsapp han estado ofertando pollo “económico”, para los tamales y ante los accesibles precios se están vendiendo muy bien, sin embargo, es pollo de muy mala calidad, golpeado, con aroma desagradable y congelado, aseguran algunos compradores que de nada sirvió lo barato, pues para ser de 50 pesos por kilo, tuvo que tirarlo, ya que parecía que está congelado desde hace varias semanas.
Por su parte, personal de la COEPRIS, que han extendido sus acciones de monitoreo y supervisión en expendios de comida y detallaron que hasta el momento no tienen denuncias directas de afectados, sin embargo se monitorean todas la quejas y denuncias que les hacen llegar y de manera personal acuden a los puntos de venta para verificar en qué ambiente se tienen éstos productos así también la procedencia de la carne y señalan que es necesario que los consumidores opten por no adquirir productos baratos que puedan causar estragos en su salud, ya que las probabilidades de resultar infectados por alguna enfermedad a causa del consumo de carne de pollo echada a perder son mayores.