Tampacán. – La caza furtiva sigue siendo un problema grave en el municipio, un delito federal que conlleva sanciones de cárcel para aquellos que sean sorprendidos en estas actividades ilegales.
En muchas partes del municipio, se han reportado disparos durante las noches, lo que sugiere la presencia de cazadores furtivos. Estos disparos se concentran en los cerros altos, donde habitan diversas especies de animales.
Es importante destacar que muchas de estas especies están protegidas por la ley debido a su estado de peligro de extinción. Por lo tanto, la cacería y el tráfico de estas especies son actividades ilegales. Además, algunos jornaleros que trabajan en parcelas ubicadas en las laderas de los cerros han informado sobre la presencia de trampas para animales, las cuales representan un peligro tanto para la fauna como para las personas.
Esta situación representa una amenaza seria para la diversidad biológica de la región, ya que la persistencia de la caza furtiva podría llevar a la extinción de diversas especies locales, por lo tanto, urgen que las dependencias federales tomen perspectiva del caso.