San Martín Chalchicuautla. – El intenso calor que ha predominado en la región huasteca está teniendo un impacto notable en el ecosistema local. La vegetación se está secando a un ritmo alarmante, generando preocupación entre los habitantes.
Esta situación es especialmente inquietante debido a que nos encontramos en la temporada propensa a los incendios forestales. La vegetación seca actúa como un combustible potencial, convirtiéndose en un verdadero polvorín que podría desencadenar un incendio con la más mínima chispa.
Ante este escenario, es fundamental que la población tome conciencia y cuide del medio ambiente. Se insta a evitar arrojar basura, colillas de cigarrillos o botellas de vidrio, ya que los rayos del sol, al pasar a través de estas botellas, pueden concentrarse y provocar un efecto de lupa, lo que aumenta el riesgo de iniciar un incendio.
Es imperativo que cada individuo asuma su responsabilidad y adopte medidas para prevenir situaciones de riesgo que puedan desencadenar desastres ambientales en nuestra región.