Apreciaciones

Muy mal distribuidos están los Servidores de la Nación en cuanto a la prestación de sus servicios. Parece que priorizan las campañas políticas y eventos partidistas sobre la atención a cientos de ancianos que hacen fila para cobrar su apoyo federal. Los directivos, como Arely García Antonio, delegada del programa Bienestar, prefieren enviar al personal a promocionar la aceptación de su hermana, Briceyda García Antonio, para una posible candidatura a la diputación local, en lugar de atender la sucursal en Loma Bonita. Desde la mañana del lunes, solo una cajera atendió a decenas de personas, dejándola sola y sin apoyo. Esta situación molestó a los beneficiarios, quienes esperaron bajo el sol durante varias horas.

Por otro lado, quien de plano dejó de pisar suelo por un cargo que le cayó gracias al trabajo de su madre y de otros, es la regidora del Verde Mayra Hernández Anastacio, quien como nunca había tenido nada se mareó en un escalón y al ver qué se le va a terminar la minita de oro de su sueldo, se movió a buscar donde acomodarse, pero se sabe que en el Verde ante su falta de experiencia y sobre todo liderazgo, le dijeron que había que formarse en la fila y seguir trabajando, cosa que no toleró y de buenas a primeras traicionó al partido que le dio el escaño y se fue a registrar como candidata a la diputación federal por Movimiento Ciudadano, donde lógicamente no logrará nada. 

El supuesto movimiento de fuerza por algunos militantes del Partido Verde ha causado gracia para algunos observadores políticos. Después de haber declarado que no buscarían una candidatura a la alcaldía, ahora reaparecen bajo el liderazgo del titular de Ingresos, Francisco Feliu Álvarez, con la intención de pelear una candidatura. Sin embargo, las juntas que realizan no parecen ayudarles mucho, ya que no cuentan con el apoyo adecuado para obtener alguna candidatura exitosa.

El recorrido realizado por la líder de los comerciantes, Yolanda Mancera Maldonado, junto con personal de Plazas y Mercados, fue catalogado como un circo. A pesar de exhortar a los vendedores a respetar áreas peatonales y limitar sus espacios, los inspectores presentes parecieron no tener voz ni voto. Fueron ofendidos y ninguneados por los vendedores, quienes se molestaron por las restricciones impuestas. Además, el titular, Edgar Coss Domínguez, ni siquiera se apareció para verificar la problemática del comercio durante todo el día.