Escuelitas de fútbol: Un espacio para impulsar la equidad y la vida sana
Tamazunchale.- Devany Karely Hernández de la Cruz vive en El Naranjal y lleva casi un año en la Escuela Comunitaria de Fútbol de su comunidad. Acude con frecuencia al campo de esta localidad perteneciente al municipio de Tamazunchale para practicar este deporte, con niñas y niños, unas tres veces por semana. "Nos enseñan a jugar y convivir con otros compañeros. Me gusta mucho practicar deporte y la entrenadora es muy buena con nosotros. Cuando juego a fútbol, soy feliz", opina esta niña.
A mediados de 2023 se implementaron escuelitas comunitarias en las comunidades de El Naranjal, El Refugio y La Cuchilla, beneficiando en este último semestre de actividades a unos 60 menores de edad entre los tres lugares, quienes participan semanalmente en las actividades programadas.
Las escuelas, que han sido dirigidas por entrenadoras, han servido para promover la igualdad y la vida sana en estas localidades. "Con estas escuelas les damos las herramientas necesarias para aprender un deporte y vivir una vida más sana y activa. El fútbol no es solo correr tras una pelota, nuestra misión es incentivar y motivar a los menores a que puedan cumplir sus sueños", dice Julia Nely Santiago Reyes, coordinadora de este proyecto y promotora deportiva en la región huasteca.
"La entrenadora es 10 de 10", resume José Manuel, de 10 años y uno de los jugadores más entusiastas en estas escuelitas comunitarias que van más allá del deporte.
APLAUDEN LA INICIATIVA
Padres y madres de los jóvenes integrantes de las escuelas comunitarias de fútbol han puesto en valor esta iniciativa que arrancó a mediados de 2023. Antonia Hernández, madre de uno de los niños y residente en El Naranjal, indicó que gracias a las escuelas comunitarias su hijo Adrián, de 6 años, ha aprendido a "convivir" y a "jugar en equipo".
En este sentido, otras de las mamás, Crisanta Hernández Hernández, destacó que gracias a este tipo de actividades los infantes "salen de las rutinas" y en general, celebró que este tipo de proyectos han permitido demostrar que las mujeres "pueden hacer más cosas y no solo estar en la cocina".
Esa iniciativa surgió como parte de la alianza entre los Sultanes de Tamazunchale e Iberdrola México, e incluyó la entrega a cada escuela de equipo de entrenamiento que consistió en: balones de fútbol, conos, platos, escaleras de coordinación, aros y bolsas de malla.
La alianza buscó fortalecer el club de fútbol y promover la equidad de género y la vida sana a través del deporte, contemplando la realización de otras actividades en favor de la juventud de Tamazunchale como clínicas de fútbol para los más pequeños, pláticas de nutrición, torneos locales para niños, niñas y jóvenes y el desarrollo de carreras atléticas para toda la población de Tamazunchale.