Plazoleta se convierte en campeón
Tamazunchale.- La escuadra de la Plazoleta no solo se adjudicó la corona de la Liga Local de Futbol Rápido de San Rafael categoría master, sino que implantó su bandera en patio ajeno, al aprovechar a un desarticulado representativo de San Rafael que, al no saber plantear su encuentro, entregó en bandeja de plata la monarquía a sus adversarios.
Bajo las decisiones arbitrales de Noé de Jesús Castro Ortega, abrieron las hostilidades en el pequeño rectángulo del barrio bravo; apenas rodó la diosa, los ´Guadalupanos´ se lanzaron como perros tras su presa, generando que los dueños de la parcela se vieran tímidos ante la bravura de los consentidos de la porra ´ola naranja´ que comenzó a ambientar con sus tacos de lengua, mientras sus muchachos le daban vuelo a la hilacha, sin poder quitarse el acecho, los locales pronto recibieron el primer latigazo, luego que el arquero Alfredo Hernández; perdiera el balón en un intento de salir, Bonifacio ´Chicote Calderón´ Vélez se dio la media vuelta y mandó a guardar la de gajos al fondo de las piolas, 1-0 que levantó la escandalera en el escenario, mientras del otro lado del río, la Plazoleta de Guadalupe no tenía un alma.
La ´Furia Roja´ trató de responder mediante Martín Hernández, aunque lo intentó sus disparos no fueron precisos. Además, Bruno Copado cerraba la cortina de su arco. Eso no achicó a los liderados por Adrián ´Maicol Arroyo´ González que en la zaga imponía evitando que sus oponentes pudiera concretar la igualada; además la enjundia de José Luis Mata, de Swany Martínez, era notoria, es así que tras recuperar una pelota en medio campo, quedó para Toño Mancera, quien limpió la zona y casi al pisar el área lanzó disparo que terminó al fondo del arco para el 2-0, tremendo sofocón para los rojos con el que se fueron los equipos al descanso.
Tras los alegatos en el descanso, San Rafael replanteó el juego: pero a pesar de eso, los de la Plazoleta mantuvieron su propuesta y eso al menos evitó que el cuadro rojo les tomará la medida, el juego se tornó más interesante y en su clímax cuando Martínez Hernández por fin pudo superar a Copado dibujando el 2-1, a golpe de gol se puso el juego para los de casa, mientras el vaivén frenético de la diosa, agrandaba las acciones sazonadas por los aficionados. El tiempo esfumó; así lo decretó el silbante Castro Ortega, el selectivo de la Plazoleta de Guadalupe conquistaba la corona, para beneplácito de su gente que se rindió ante sus guerreros al dejar la ´piel en la cancha´.
