Columna deportiva: se tolera más la violencia que los valores humanos
Tamazunchale.- La violencia en los campos aumenta y acá en el juego entre Sultanes de Tamazunchale versus CPTIF Xilitla en semifinales de la Liga Regional Sub 15 que preside José de Jesús Orta Chávez se dio, no porque el alcohol esté inmerso, sino por la falta de responsabilidad de las directivas, tanto de la organización deportiva como de los clubes y la ausencia de valores humanos para frenar este tipo de actos, máxime en una etapa de formación como en esta competencia.
Más que un triunfo, debería enseñarse a los jugadores en fase de formación, a comportarse de la mejor manera y hacerlos campeones para la vida y no para un torneo, que ni el más alto título futbolero, es más importante que su forma de comportarse ante los demás, realmente esto les dejará aún más para su futuro que una copa de futbol. La sola agresión al árbitro Jaime Arredondo Solórzano; así hubiera sido el peor arbitraje, daña y también atenta contra este deporte, del que los mismos entrenadores dan cátedra de la formación integral, no solo es jugar para ganar, también se necesita saber perder y aun cuando un árbitro se equivoque saber comportarse. Por cierto, la agresión al árbitro se dio, lamentablemente porque algunos padres de familia de Xilitla se metieron y buscaban que los grabaran para hablar contra el árbitro, algo que impidió acercarme antes de tiempo para capturar esa agresión cuando el mismo Gastón Peralta entrenador de Xilitla y otros padres de familia hacían tumulto ante el árbitro. El juvenil jugador David (N) desde antes estaba agresivo e insultó al árbitro, incluso cuando grababa su paso y capturaba me insultó, eso es lo de menos, pues no es el primer episodio que experimentó en mi paso por el deporte como reportero, donde incluso he sido agredido. A los jugadores les agrada una gran fotografía y que se hable bien de ellos; pero cuando se equivocan, no les parece que se comenten los hechos. Para sí mismos y para su gente "el que está mal es uno". Más allá de todo, nunca comentó algo que no vi, no escribo por escribir, y mucho menos por dañar a alguien, lo digo con conocimiento de causa.
En esta situación, el primer responsable, es el dirigente de la liga, José de Jesús Orta Chávez, nunca un organismo deportivo puede permitir que sean los equipos los que pongan a sus árbitros, lo más sano, es una tripleta de arbitraje alterno; además, al menos debió de estar un visor capacitado e imparcial del organismo deportivo.
En segundo lugar, donde queda la experiencia de Gastón Peralta, el argentino conocedor de futbol y de Maximino Hernández, también ex jugador de Tercera División Profesional que debieron pedir a la liga un arbitraje de otros municipios, para evitar este tipo de episodios. Ahora por solapar estas situaciones apareció la violencia, donde se arriesga la integridad de los jóvenes menores de edad, porque esto puede ocasionar un acto más degradante, recientemente se vivió en un campo de beisbol en Ciudad Valles. Afortunadamente los padres de familia de Tamazunchale no ingresaron al terreno de juego, algo que no está permitido, por la liga y se sanciona con pérdida de juego.
Ahora bien, al árbitro, le faltó tomar el toro por los cuernos, ahí se equivocó, no es el primero ni el último que le sucederá, faltó experiencia, para no dejar el partido, sino asumirlo con personalidad, ese fue su error, lo indeciso en sus apreciaciones, lo llevó a que algunos jugadores le tomaran la medida.
Bueno, todo está en manos de la dirigencia deportiva. La resolución de lo que pasará, la determinarán algunos árbitros de un colegio externo, al parecer de Tampico, Tamaulipas, digo, si están apoyando a la liga; porque mejor no los contrataron para dar el servicio en estos juegos tan importantes del futbol regional. Y afortunadamente son árbitros los que tomarán la decisión y al igual, el Presidente de la dirigencia deportiva, conforme a su dicho, es DT Profesional. Lo saben, una cédula arbitral es documento oficial inviolable. El partido de acuerdo al documento del juez lo culminó a los 76 minutos.
Por último, es inverosímil que Gastón Peralta, en un escrito que dirige al presidente de la liga, de una lección negativa a sus demás jugadores al defender al jugador que agredió, cuando fue una realidad. Cuando más bien debería de enseñarle que eso no debe de hacerse, porque además otros lo vieron, pudiera no haber video o fotografía; pero el árbitro lo asentó en la cédula y en un juego de futbol, es más importante eso. Tampoco es hacer leña del juvenil jugador, sino mostrarle que sus actitudes no fueron las correctas. Hoy miércoles la directiva dará el veredicto de lo que sucederá; pero como dice el adagio, "lo que mal empieza, mal acaba".